Relleno y aumento de pómulos sin cirugía

Para elevar los pómulos caídos no es necesario ya recurrir a técnicas de cirugía plástica. Los avances en medicina estética han encontrado una solución eficaz y mínimamente invasiva para tratar aquellos pómulos caídos. Por un lado, el tratamiento es efectivo en pacientes (tanto mujeres como hombres) jóvenes que desean redefinir sus pómulos y mejillas, especialmente si han pasado por fases de ganancia y pérdida de peso.

Por otro lado, uno de los efectos más habituales del envejecimiento cutáneo es también la pérdida de elasticidad y volumen en el rostro, generando una flacidez que comienza en los pómulos. En este caso la tonificación del área y la mejora de su aspecto también puede ayudar a devolver una apariencia más rejuvenecida y luminosa a la cara.

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¿En qué consiste el aumento de pómulos?

Hay que tener en cuenta que con el paso del tiempo, la piel del rostro pierde colágeno y elastina, unas sustancias que aportan sujeción y elasticidad a los tejidos blandos, restando plenitud a las mejillas y proyección a los pómulos caídos. Para corregir este efecto del envejecimiento, o bien, prevenirlo y ganar proyección si los pómulos no están marcados de forma natural, la medicina estética propone una solución no quirúrgica

La redefinición y aumento de pómulos es una técnica de medicina estética que tiene el objetivo de devolver una forma óptima, simétrica y de mayor proyección a los pómulos caídos y mejillas. Teniendo en cuenta los rasgos faciales individuales, se lleva a cabo una planificación de los puntos a tratar en esta zona específica del rostro para mejorar la elasticidad y tersura, ganar volumen y mejorar la simetría facial.

El material de relleno usado para realizar esta técnica médico-estética es el ácido hialurónico, un componente natural que se encuentra en nuestro organismo y que tiene múltiples beneficios para la piel, entre ellos la aportación de volumen, la mejora de la hidratación y, en consecuencia, la atenuación de signos visibles de la edad en la zona tratada, como bien pueden ser las líneas de expresión y los surcos que aparecen.

¿Qué técnica se aplica en el aumento de pómulos?

En la actualidad, la técnica más eficaz es el uso de microcánulas para la inyección de ácido hialurónico. Por un lado, las microcánulas son unas finas agujas que permiten depositar el producto en zonas específicas del rostro, minimizando al máximo la posibilidad de sufrir hematomas tras la sesión de aplicación.

Por otro lado, el ácido hialurónico es un material biocompatible y biodegradable de relleno, el cual nos permite aportar volumen e hidratación, redefiniendo contornos y mejorando la definición de los pómulos. Además, hoy existe una nueva generación de este tipo de material, más cohesivo y dinámico, formulado concretamente para tratar la zona.

Cabe mencionar que la liberación del producto por medio de las microcánulas debe realizarlo un profesional médico-estético cualificado. El dominio de la técnica de aplicación es fundamental para conseguir los objetivos marcados con el paciente. Para lo cual se tendrá en cuenta en el diagnóstico inicial el tipo de pómulo original.

Es decir, la zonas de aplicación de producto para paliar los efectos de flacidez y caída dependerán de si el pómulo original es de tipo: alto, comenzando en la sien; bajo, comenzando en el ángulo de la boca; ancho, típico de rostros redondos o cuadrados; centrado, sin pronuncia la mejilla al sonreír; o bien, pequeño, cuando las mejillas son más carnosas.

¿Qué ventajas tiene el tratamiento facial para aumento de pómulos?

El efecto de las micro-inyecciones comienza a notarse inmediatamente después de la primera aplicación, si bien el efecto deseado se consigue tras una o dos semanas.
Es un tratamiento médico-estético, por lo que resulta mínimamente invasivo, además de rápido y simple. Se realiza en dos sesiones: primero la aplicación, segundo revisión.
Es un prácticamente indoloro y no es necesario el posoperatorio, ya que se trata de una intervención sin cirugía que no requiere recuperación posterior.
Es un tratamiento reversible ya que se utiliza un material biodegradable y seguro que se va reabsorbiendo, desapareciendo sus efectos al cabo de 1 o 2 años según el paciente.
Se puede repetir el tratamiento regularmente y ampliar el área facial que se desea tratar. Además, es también un tratamiento preventivo a edades más tempranas.
El aumento de pómulos en pacientes de edad más avanzada puede aportar una mayor vitalidad a la mirada ya que los ojos quedan menos hundidos al ganar proyección.
Aporta equilibro en el rostro haciendo que los otros rasgos faciales más prominentes queden difuminados y mejora el aspecto de las mejillas, así como su hidratación.

Nuestros especialistas en relleno y aumento de pómulos

Dr. Víctor Hidalgo

Licenciado en Medicina y Cirugía. Especialista en Cirugía Maxilofacial, Implantes dentales y Estética Facial.