Puede que no sea una de las dolencias más graves, pero sí de las más molestas. Los famosos flemones o abscesos dentales son infecciones bacterianas en las encías.
El origen es la comunicación de la boca con el tejido periodontal del diente, es decir los tejidos de sujeción del diente. Normalmente es debido a una caries sin tratar que llega al tejido pulpar del diente, o nervio, provocando inicialmente una pulpitis, una necrosis y creando un absceso. Sin embargo, además de las caries, puede aparecer debido a enfermedades periodontales, un traumatismo o presión constante o una amigdalitis que se ha complicado.
Normalmente, sus síntomas son fáciles de identificar ya que, al provocar una notable hinchazón en la mandíbula, son fácilmente visibles. Lo primero que debemos hacer para evitar que las molestias vayan a más, es identificar la enfermedad cuanto antes y abordarla lo antes posible.
Pero, ¿cómo se puede curar el flemón y, sobre todo, cómo podemos prevenirlo?
Desde Grupo Udemax recomendamos que lo primero que hagáis sea venir a vernos. El dolor puede ser intenso y será mejor que nos pongamos manos a la obra de inmediato.
En caso contrario, de que intentéis tratarlo por vuestra cuenta, no eliminaremos el dolor por completo y volverá a aparecer reiteradamente.
Normalmente, en una primera consulta os recetaremos antibióticos para eliminar la infección y antiinflamatorios para quitar el dolor y bajar la hinchazón.
Además, pasadas unas semanas, después de controlar el flemón determinaremos si es necesario practicar algún procedimiento adicional,
Al ser un problema bacteriano, la mejor manera de prevenir nuestra boca de posibles flemones es manteniendo una rigurosa y escrupulosa limpieza bucal. La limpieza de dientes y encías es la base de una salud bucal óptima, con la que podremos evitar este tipo de infecciones, además otras enfermedades de la boca.
¿Cómo saber si es un flemón?
- Dolor intenso y punzante
- Sensibilidad dental al ingerir bebidas o alimentos fríos o calientes.
- Mal sabor de boca
- Inflamación visible en la cara o las mejillas.
- Malestar general.
- Halitosis o mal aliento.
- Fiebre en caso de que la infección esté muy avanzada.
- Inflamación gingival (flemón en la encía).
- Dificultades al comer o abrir la boca con normalidad.En caso de que la pulpa se haya necrosado, el diente irá adquiriendo un color oscuro.
Si sientes alguno de estos síntomas, pide cita de inmediato y te recibiremos en cualquiera de las consultas de Grupo Udemax.
Cuida tu boca y estarás cuidando tu salud.